Una nutrición apropiada es esencial para la vida.
A través de los nutrientes se constituyen los componentes necesarios para el buen funcionamiento del organismo, que incluyen aquellos que forman parte del sistema inmune.
Cualquier virus puede entrar al cuerpo, entre más débil o suprimido se encuentre el sistema inmune es más probable contraer la enfermedad o que ésta se propague.
¿Cuáles son las cosas que debilitan al sistema inmune?
Toxinas (químicos, alcohol, cigarro, medicinas, etc.).
Deficiencia nutricional, causada por una dieta inapropiada.
Estrés.
Azúcar o comida procesada.
Trabajar en exceso.
Falta de sueño.
Medidas para proteger nuestra salud y fortalecer el sistema inmunológico:
Alimentarse de comida real (frutas, verduras, granos, proteínas, grasas saludables, etc.) y, sobre todo, consumir alimentos ricos en vitamina C y antioxidantes como mandarina, kiwi, mango, fresa, toronja, pimientos etc.
No comer azúcar refinada.
Eliminar alimentos procesado.
Evitar consumir alimentos inflamatorios, como la comida chatarra.
Dormir y descansar bien, mínimo 7-8 horas diarias.
Hacer ejercido cardiovascular y de resistencia por lo menos 3 veces por semana.
Tomar de 2 a 3 litros de agua natural (no cuentan, sopas, cafés o tés).
No fumar y evitar el alcohol.
Mejorar el manejo de estrés y no entrar en pánico (el estrés enferma).
Complementar la dieta con suplementos, vitaminas y minerales.
Hay una serie de vitaminas y minerales que juegan un papel esencial en el mantenimiento de un sistema inmune fuerte. Para poder apoyarlo se recomienda el consumo de:
Zinc 50- 75 mg diarios.
Vitamina D3 5,000 unidades diarias.
Probióticos 50 billones diarios, son de suma importancia ya que el 75% de sistema inmunológico se regula en el intestino.
Vitamina C, mínimo 1 g de buena calidad, además de la comida (pimientos, cítricos, hojas verdes).
Adaptógenos como reishi, cordyceps, ashwagandha, shiitake, etc.
Antioxidantes como vitamina E, CoQ10, glutatión, resveratrol, etc.
Que una alimentación balanceada sea tu medicina para mantener un estado de salud y bienestar general óptimos, reduciendo el riesgo de padecer enfermedades.
Antes de consumir cualquier suplemento consulta a tu médico o a un experto de la salud.